jueves, noviembre 17

memorias

Esa piba que era un infierno
añitos juveniles, de grano en frente y buche en alto
gavilanes
ella sacudió las gambas, me dejó terminado
como los paquetes de puchos, constantes
yo escribía como un linyera
pluma en boca y candombeo
Se me metió en casa de los viejos
la piba, ese infierno
se me metió en los calzoncillos
fantasías
y no me acuerdo ni su nombre
ni su gracia, ni su risa
solo ese fuego jodido
ardiendo en casa de mis viejos
allá por aquellos años juveniles
de pico, pala y overol

1 comentario:

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